Saliendo del tribunal ante la mirada de la madre de la víctima.
Olga Miriam Galdámez en vida.
Olinda Salguero Mayorga,madre de la victima.
Me encuentro con sentimientos encontrados entre alegría, emoción y a la vez tristeza, pues he sufrido bastante con la perdida de mi hija, agradezco a las autoridades por aplicar la pena máxima, aunque yo sé que eso no le devolverá la vida a mi hija.
Me encuentro con sentimientos encontrados entre alegría, emoción y a la vez tristeza, pues he sufrido bastante con la perdida de mi hija, agradezco a las autoridades por aplicar la pena máxima, aunque yo sé que eso no le devolverá la vida a mi hija.
Maribel Galdámez Salguero, hermana de la victima.
Me siento contenta por el fallo que se dictaminó el juez, e invito a todas las mujeres que sufren maltratos a que denuncien y que no pase lo de mi hermana que no denunció y por eso perdió la vida.
Me siento contenta por el fallo que se dictaminó el juez, e invito a todas las mujeres que sufren maltratos a que denuncien y que no pase lo de mi hermana que no denunció y por eso perdió la vida.
Lo condena a 40 año de prisión por asesinar a su esposa
El día 22 de julio, a las diez treinta de la mañana en el tribunal segundo de sentencia penal de la ciudad de Cobán, se dictaminó sentencia en contra del señor, Cristóbal Aldana Archila, quien asesinó a su esposa Olga Miriam Galdámez, la sentencia fue de cuarenta años de cárcel inconmutables dictaminada por el juez Edwin Roberto Ruano. Este fue el primer caso de femicidio que se realizó en la ciudad de Cobán. Se llegó a esta sentencia ya que había suficientes pruebas científicas que se realizaron de parte del Ministerio Público, dichas pruevas realizadas dieron resultados positivos en la casa donde se cometió el asesinato.
Como sucedieron los hechos.
La señora Olinda Salguero Mayorga madre de la victima declaró que la relación de su hija con su esposo ya iba mal pues don Critóbal, ya no quería que su hia trabajara, la quería mantener en la casa realizando oficios domésticos, cosa que Olga Miriam Galdámez no quería pues ya estaba acostumbrada a trabajar. Al no acceder a las peticiones de don Cristóbla, el 22 de julio del 2008 en Fray Bartolomé de las Casas, la asesinó en su casa de un palazo en la cabeza para luego meterla dentro de un costal e ir a tirarla dentro de unos matorrales.
El caso fue seguido por la Defensoría de la mujer Indígena.
Ana Rutilia Ical, delegada de la defensoría de la mujer indígena, conjuntamente con un grupo de mujeres, le estuvieron dando seguimiento al caso en apoyo a Olinda Salguero Mayorga, madre de la mujer asesinada, la madre de la victima dijo sentirse satisfecha pues con esta condena se sienta un precedente, ya que fue el primer caso de femicidio resuelto en las verapaces. Ella invító a que las mujeres denuncien todo acto de violencia y que no se queden calladas como lastimosamene lo hiso su hija qeu en paz descanse.
El día 22 de julio, a las diez treinta de la mañana en el tribunal segundo de sentencia penal de la ciudad de Cobán, se dictaminó sentencia en contra del señor, Cristóbal Aldana Archila, quien asesinó a su esposa Olga Miriam Galdámez, la sentencia fue de cuarenta años de cárcel inconmutables dictaminada por el juez Edwin Roberto Ruano. Este fue el primer caso de femicidio que se realizó en la ciudad de Cobán. Se llegó a esta sentencia ya que había suficientes pruebas científicas que se realizaron de parte del Ministerio Público, dichas pruevas realizadas dieron resultados positivos en la casa donde se cometió el asesinato.
Como sucedieron los hechos.
La señora Olinda Salguero Mayorga madre de la victima declaró que la relación de su hija con su esposo ya iba mal pues don Critóbal, ya no quería que su hia trabajara, la quería mantener en la casa realizando oficios domésticos, cosa que Olga Miriam Galdámez no quería pues ya estaba acostumbrada a trabajar. Al no acceder a las peticiones de don Cristóbla, el 22 de julio del 2008 en Fray Bartolomé de las Casas, la asesinó en su casa de un palazo en la cabeza para luego meterla dentro de un costal e ir a tirarla dentro de unos matorrales.
El caso fue seguido por la Defensoría de la mujer Indígena.
Ana Rutilia Ical, delegada de la defensoría de la mujer indígena, conjuntamente con un grupo de mujeres, le estuvieron dando seguimiento al caso en apoyo a Olinda Salguero Mayorga, madre de la mujer asesinada, la madre de la victima dijo sentirse satisfecha pues con esta condena se sienta un precedente, ya que fue el primer caso de femicidio resuelto en las verapaces. Ella invító a que las mujeres denuncien todo acto de violencia y que no se queden calladas como lastimosamene lo hiso su hija qeu en paz descanse.
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